lunes, 13 de agosto de 2012

28. Smiling through heartache.

Zoé's POV
Justo antes de que "Shine-A-Light", la canción con la que cerraban el concierto, terminará logré llegar a tras-bambalinas y tomar algunas fotos de ellos pero una de mis favoritas fue la que tome cuando estaba sobre una plataforma y la tome justo cuando Tom, Danny y Dougie habían alzado sus instrumentos sobre sus cabezas al mismo tiempo que Harry lanzaba ambas baquetas al aire agradeciéndole al público por asistir, fue una toma perfecta. Bajé de la plataforma con cuidado y me reuní con algunos del equipo, dejé mi cámara colgada en mi cuello mientras me unía a los aplausos que el público y los del staff producían. Estaba tan orgullosa de esos cuatro chicos que me hicieron sentir más emociones en una sola noche que en toda mi vida. Mientras recorría toda la Arena para tomar fotos de todos los ángulos posibles, coreaba las canciones, lloraba con ellas, sonreía como un tonta y todo era tan... Indescriptible.
Cuando los vi aproximarse hacia mi no pude evitar que esa emoción que había guardado durante todo el concierto se desbordara en este momento. Corrí hacia ellos y me lance a los brazos de la persona que los encabezaba que era Danny el cual solo soltó una de sus carcajadas y me envolvió en un abrazo del cual nos separamos después de unos segundos.
- ¿Y bien? - Pregunto Tom detrás de Danny asomándose por su hombro.
- ¿Me preguntas eso a mi? - Dije atropellando palabra tras palabra. - ¡Estuvieron increíbles! Y... -  No pude proseguir pues un nudo se formo en mi garganta y una lágrima se  deslizo por mi mejilla, seguía con miles de sentimientos encontrados al recordar la canción que me había hecho llorar más... The Heart Never Lies.
Los chicos cambiaron su faceta por una de preocupación.
- Oh ¡No! No lloro por tristeza es solo que todo esto me parece irreal y... - Inhale profundamente y después deje caer mis hombros. - No sé. - Solté una risa a la cual ellos se unieron. Harry paso su brazo izquierdo por mi hombro y después Danny dejo una toalla llena de sudor sobre mi cabeza la cabeza la cual le lance una vez que le di forma de pelota. Tom, a manera de broma, sacudió su cabellera, húmeda por el sudor, enfrente de mi cara haciendo que pequeñas gotas de ese liquido chocaran contra ella y Doug, bueno, él no hizo nada que no se comparara con lo que hicieron el resto de sus amigos. Ahora estaba llena del sudor de los chicos y del mío, me empecé a sentir pegajosa, acalorada y apestosa.
- ¡Son unos asquerosos! - Reclame mientras intentaba limpiarme con la blusa gris que traía encima de una azul.
- Es el baño de la victoria. - Dijo Harry aun con su brazo sobre mis hombros.
- Es repugnante. - Respondí dramatizando cada una de mis palabras haciendo que Danny soltara, nuevamente, una de sus clásicas carcajadas. Íbamos camino a los camerinos y aproveche para hablar por la radio diciéndoles que fueran desmontando las cámaras y las fueran guardando en sus estuches correspondientes para que después los lleven al camión de utilería donde irían todas las luces, pirotecnia y plataformas que se usarían en cada uno de los conciertos. También les dije que en unos minutos iría por mi computadora a cabina pero me dijeron que alguien me la llevaría al camerino de los chicos y me pareció una excelente idea.
Tardamos un poco mas en llegar pues varios del equipo felicitaban a los chicos a su pasar y ellos, como los caballeros que son y suponen ser, se detenían agradeciendo las palabras de aliento y animo.
Cuando por fin llegamos solo fue cuestión de guardar algunas cosas, mi laptop ya se encontraba sobre una mesa y al lado estaba su backpack junto con el estuche de mi cámara donde estaban todos los objetivos que había comprado, cada uno para algo diferente. Salimos en minutos por la puerta trasera, justo por donde yo había entrado, y subimos a su tour bus de dos pisos color rojo con negro, Dean y David me habían dicho que yo iría con ellos en aquel autobús y también en los mismos aviones, en pocas palabras, seria su sombra por estos meses. También Tommy Jay Smith, su tour manager, me había dado indicaciones y que yo estaba contemplada como si fuera una mas de la banda y eso me hizo sentir bastante halagada aunque no quería causar tantas molestias.
Aquel autobús era impresionante mas impresionante por dentro que por fuera. Tenia una especie de sala donde había una pantalla de plasma empotrada en la pared y justo debajo una consola de juegos que pude reconocer como el Xbox 360, habían cuatro controles conectados a esta y justo abajo había un reproductor de DVD's flanqueado por varias cajas de películas, las mas destacables eran todas las que componían la saga de Star Wars pues eran las primeras. Justo detrás de la sala se encontraba una pequeña cocina con electrodomésticos de acero inoxidable en los cuales se contaban un microondas y un refrigerador, delante de esta pequeña cocina había una mesa cuadrada con un asiento en forma de semicírculo que podía abarcar como mínimo a tres personas. Esto era todo lo que componía la planta baja sumando un baño completo no tan espacioso y las escaleras que llevaban al otro piso el cual tenia ventanas en todas las paredes, dos camas individuales separadas por un angosto pasillo, otra pantalla, un minibar escondido detrás de unas puertas y un par de sofás de cuero negro, material que recubría todos los asientos que se encontraban en este autobús. El autobús era suficiente para mantener confortables a las ocho personas que viajarían aquí. Estaba tan absorta observando cada uno de los detalles que se encontraban en la planta alta que el brusco movimiento del autobús al arrancar hizo chocara contra una de las paredes que por suerte tenia un asiento debajo que me detuvo para evitar una caída peor. Creía que nadie había escuchado mi embarazoso accidente hasta que la cabeza de Danny se asomo por las escaleras.
- ¿Estás bien? - Pregunto con los ojos un poco mas abiertos de lo normal.
- Si, solo fue un leve tropiezo.
- Menos mal. - Dijo suavizando su expresión y dejándome nuevamente sola.
Pude escuchar como los gritos de los fans aumentaban de volumen a medida que al bus avanzaba, me asome por una de las ventanas y vi filas y filas de chicas y chicos con carteles en cartulinas de muchos colores con muchos mensajes diferentes. Leí algunos y reí por otros pero después de cinco minutos regrese a mi posición anterior perdiendo mi mirada en la nada.
Tommy me había dicho que nos hospedaríamos en un hotel llamado "Crown hotel" que estaba a veinticinco minutos de la Arena. Mañana saldríamos a primera hora hacia Manchester para que los chicos dieran una presentación en el MEN Arena. Yo me enfocaría en el backstage a partir de mañana pero hoy tenia que revisar las grabaciones, escoger los mejores ángulos de cada toma, editarlo y sintetizarlo para hacer una video de mínimo un minuto, máximo un minuto y medio... Regrese el enfoque de mi vista a la realidad y examine el reloj en mi muñeca, eran las diez cuarenta y siete. Si todo salía como estaba planeando, el teaser quedaría listo a las tres de la mañana aproximadamente, si es que tenía suerte.
Aunque fueran unos minutos los aprovecharía para revisar las grabaciones, tome mi MacBook de la mochila y al hacerlo note aquel estuche que contenía unos lentes los cuales debía ponerme cuando viera la televisión, usará la lap o leyera por indicaciones de mi oftalmólogo. Tenían un corte llamado retro, el clásico estilo de los Ray-ban. Me los puse mientras la pantalla de mi Mac se encendía, después recogí mi cabello nuevamente en una coleta pues esta se había desecho en algún punto de mi recorrido por la Arena. Limpie mis lentes de las motas de polvo que se les habían pegado y volví a colocarlos sobre el puente de mi nariz. Una vez que mi computadora se había prendido por completo busque las grabaciones en el disco duro externo que les había dado y las encontré rápidamente pues estaban en la primera carpeta, abrí la primera grabación y en lo que se cargaba para reproducir conecte los audífonos y me los coloque para después perderme, nuevamente, en aquel concierto.

Dougie's POV
Ya estábamos en el autobús de camino al hotel el cual suponía ser de veinticinco minutos pero un terrible tráfico hizo que este no tuviera un tiempo determinado. Todos nos encontrábamos tirados en algún asiento, en mi caso, yo estaba en aquel pequeño comedor con los pies sobre la mesa y me extraño un poco que Tom, que estaba al lado de mi, no me dijera algo al respecto, lo notaba nervioso y con la mirada perdida aunque ya sabíamos el motivo causante de eso.
- Hey, Tom... - Ni respondió. - ¿Tom? - Aun sin reacción. Busque alguna manera de sacarlo de su trance temporal la cual encontré en un cojín al extremo contrario de donde yo me hallaba, perezosamente, me puse de pie para tomar aquel objeto y lanzárselo directo a la cara, él soltó un quejido y di por finalizados mis esfuerzos.
- ¿¡Qué!? - Dijo después de lanzar nuevamente el cojín a mi dirección.
- ¿Estas nervioso por lo de Giovanna? - Inquirí mientras me sentaba en la misma posición.
- Bastante, si...
- Llevan juntos la mayor parte de su vida y ¿Enserio te preocupa que no acepte casarse contigo?
- Bueno, si lo dices así suena poco probable que me diga que no pero siempre habrá una posibilidad de que me diga que no.
- Tranquilo, Tom, estoy seguro de que todo saldrá bien. - Le di una palmada en la espalda a manera de animo y él sonrió agradeciendo esas palabras. - Baja los pies de la mesa, Doug.
- ¡Ese es mi Tom! - Reímos unos segundos y entonces capte que algo faltaba. - ¿Y Zoé? - La busque con la mirada pero antes de volver mi vista hacia las escaleras una voz me distrajo.
- Estaba arriba. - Contesto Danny sin interrumpir su partida de FIFA contra Harry.
- Gracias. - Me puse de pie y tome dos botellas de agua del refrigerador, subí por aquellas escaleras y al llegar la encontré sentada sobre una especie de banca que tenia el mismo largo que dos ventanas. Tenía sus pies sobre esta y su vista fijada en su laptop con los audífonos puestos y su cabello recogido en una coleta improvisada que dejaba varios mechones sueltos. Encontré adorable la manera en que aquel par de lentes la hacían ver mas pequeña de tamaño y aun mas adorable la forma en que inconscientemente llevaba su dedo índice al puente de estos para regresarlos a su lugar antes de que estos se hubieran resbalado un par de centímetros y llegaran casi a la punta de su nariz. De repente, un chasquido proveniente de sus dedos me sobresalto. Ella cambio su posición a dejar la laptop sobre el asiento y a cruzar sus piernas para después empezar a hacer algunas cosas de una manera tan ágil, los audífonos parecían estorbarle así que los dejo reposar en su cuello y fueron como diez minutos en los que el autobús no se movía, en los que yo la observaba dejando caer mi peso sobre la pared y en los que un estornudo distrajo su atención unos segundos.
- Salud. - Volteo a verme y una sonrisa se dibujo en sus labios. Me acerque a ella y le tendí una de las botellas que traía, cuando la tomo nuestros dedos de rozaron por unos segundos y una especie de corriente eléctrica recorrió mis brazos hasta llegar al final de mi columna.
- Gracias, estaba muriendo de sed. - Antes de desenroscar la tapa me regalo una dulce sonrisa, destapo la botella y se la llevo a sus labios dando un par de sorbos, cuando la alejo y la volvió a tapar soltó un suspiro de alivio y regreso su vista a mi mientras entrelazaba sus dedos y los estiraba a tal punto que se escucharon unos chasquidos desde detrás de la piel y la carne que envolvía a sus huesos y ligamentos. - ¿Cómo te sientes? -  Preguntó con aquel dulce tono de curiosidad mientras doblaba sus piernas y las pegaba a su pecho dejando su cabeza reposar su cabeza entre sus rodillas.
- Mi cuerpo tiene cierta sensación de letargo pero sigo sintiendo aquella emoción de éxtasis que me dan ganas de gritar.
- ¿Siempre es así?
- Si, incluso después de tantos años. - Una mirada pensativa se plantó en sus ojos y nos quedamos en silencio unos minutos que pudieron parecer segundos, fue un silencio apacible y cómodo, solo estuvimos ella y yo, algo que hace mucho que no me sucedía con una chica. Podía estar con los chicos tranquilo y en silencio pero con una mujer siempre sentía que cuando nos inundaba el silencio es porque algo estaba mal pero con Zoé, ahora, significaba que todo estaba bien.
- ¿Cómo le haces?
- Hacer... ¿Qué?
- Eso... pararte en un escenario enfrente de miles de personas y tocar de la manera en que lo haces ¿No te da miedo? O ¿No te sientes nervioso?
- Humm... El miedo y los nervios siempre estarán presentes pero entendí que ese miedo es infundado por los nervios, sientes nervios de que algo salga mal e instintivamente el miedo se une a ellos creando un sentimiento que siempre te hará cuestionarte o mas bien afirmarte que algo saldrá mal. Que una cuerda se rompió, que erre en una nota, que el bajo no se escucha lo suficiente, etcétera. Pero si toda la vida me quedará estancado en esa clase de cosas y sentimientos no podría seguir adelante y no podría ser lo que soy ahora por eso he decidido ignorarlos al punto de solo enfocarme en como las cosas podrían salir bien, porque ¿Sabes? Me canse de ser el apático chico que teme que las cosas salgan de la peor manera y decidí ser ese chico que se arriesga para conseguir lo que quiere... - Y en ese momento, instintivamente, una mano mía busco una suya y la entrelazo dándole un leve apretón que ella respondió de la misma manera con una sonrisa incluida.
- Eres muy valiente. - Afirmo ella y supe que no solo se refería a aquel momento en el que me planto enfrente de miles de personas.
- Tú también lo eres. - Soltó una risa perdiendo su mirada a través de la ventana dejando su mejilla recargada donde anteriormente había estado su mejilla.

Zoé's POV
"El pasado siempre está presente." - Maurice Maeterlinck, dramaturgo belga de lengua francesa perteneciente al movimiento simbolista que con cinco sencillas palabras lograba denotar el porqué de mi extraño cambio de humor.
"Eres muy valiente" dice uno mientras el otro le responde "Tu también lo eres". Algo tan sencillo como eso logro cristalizar mi visión haciendo que las memorias salieran de su escondite e invadieran mi mente mientras me aferraba a aquella mano que ahora era lo único que me mantenía un paso atrás de esa delgada línea entre derrumbarse y mantenerse firme.
Una mirada inquisitiva se poso sobre mi perfil haciendo que, inevitablemente, mis ojos se clavaran en los suyos. Note que se dio cuenta de algo, que sus labios estaban a punto de soltar una pregunta, justo la que yo esperaba.
- ¿Qué piensas? - Su voz impregnada de curiosidad y sus ojos llenos de preocupación, sabia que estaba apunto de llorar. Dude unos segundos, suficientes para darme cuenta de que estaba cansada de mantener esos recuerdos enterrados, de ahogarme con ellos así que, con un audible nudo en la garganta, le comienzo a contar la razón detrás de mi voz temblorosa.
- Leonardo. - Digo aun no muy convencida, él reconoce aquel nombre enseguida.
- Oh. - Fue un sonido incomodo y pude leer que no sabia si era correcto preguntar mas o solo quedarse en silencio a esperar a que yo respondiera, yo facilitaría las cosas.
- Cada cosa me recuerda a ellos pues se acerca la fecha de su primer aniversario luctuoso... - Me detengo secamente antes de decir que es el mismo día en el que yo cumplo años, no quiero ser una molestia y no quiero causar lastima, o mas de la que ya he causado. Me doy cuenta de que ninguno de ellos sabe que día es mi cumpleaños, ni Claire ni Izzy ni Carrie ni nadie. Saben que día murieron ellos pero no saben que día nací yo. Una extraña sensación oprime mi pecho, no se si es malo o bueno.
- Y eso, de la valentía... - Prosigo atrapando de nuevo la atención de Dougie que se había perdido al otro lado de la ventana. De repente tengo aquella sensación de que debo detenerme pues seguramente lo estoy agobiando con todos mis problemas que no son los suyos pero no me importa, me vuelvo egoísta y le suelto aquello que me frunce el ceño.  - Me lo dijo mi hermano hace siete años por primera vez pero no por última, me lo repetía constantemente cada que tocábamos en algún lugar y yo le animaba de la misma manera en la que tu lo hiciste.
- ¿"Tocábamos"? - Cito marcando una interrogación. - Tu y tu hermano ¿Tenían una banda? - Veo un brillo nuevo atravesar sus ojos, asentí un par de veces y una sonrisa curvó sus labios.
- Si... - Hago una pausa esperando que él diga algo pero, como no es así, continuo. - Se formo "oficialmente" - Marque las comillas con mi mano libre. - Cuando yo empecé la preparatoria y cuando Leo empezó la universidad.
- ¿Como se llamaban?
- Vitale Legionis.
- ¿Qué significa?
- En latín "Leones llenos de vida" o "Leones rebosantes de vitalidad"
- ¿Por qué se llamaban así?
- Por el significado de nuestros nombres, el de Leo era de origen Germánico y significa "Tan fuerte como un León" y Zoé, de origen griego bajo el significado de "Vida"
- ¿Tu nombre significa vida? - Asiento y su sonrisa se ensancha aun mas y mi estomago es invadido de mariposas al pensar que es mi nombre la razón de su reacción. Sus labios se entreabren para decir algo pero parece que prefiere guardar aquello para si mismo y le resto importancia pero no curiosidad. - ¿Por qué te acordaste de tu hermano? - Un pesado suspiro es liberado de entre mis labios pero comienzo a contarle esa memoria que siempre se preservará en mi cabeza y corazón, aquella memoria que hizo llorar a mi madre el día de su cumpleaños número treinta y nueve hace seis años, el Sábado 26 de febrero del año 2005 año en el que Leonardo cumpliría diecinueve años en mayo y yo dieciséis en Junio.

FLASHBACK
- ¡Ni loca voy a cantar eso solo porque tu novia este aquí! - Le reclamé a Leonardo sumamente enojada.
- ¿Qué tiene de malo? - Preguntó desvergonzadamente a lo que yo enarqué una ceja incrédula pero el solo sacudió su cabeza así que tome las hojas que acababa de darme y cite lo que en ellas decía.
- "Your hips, my hands, you swing, you dance. Yeah, I feel pretty lonely baby so just let me in - Con voz un poco rasposa tratando de crear una atmósfera sensual"
- ¿Por eso? Vamos, Zoé, es una de tus canciones favoritas de The Maine y aparte solo a ti te sale esa voz que derretiría a cualquiera pero, eh, cuidado que golpeo a cualquiera que intente acercarse a ti con la intención de cumplir esos versos. - Reí por su estúpido comentario y le di un leve golpe en el brazo.
- Si, pero es el cumpleaños de mamá, seguro ella preferiría "Separate Ways" de Journey o "Pour some sugar on me" de "Def Leppard" o incluso... - Cubrió mi boca con una de sus manos poniendo los ojos en blanco unos segundos y después lanzarme una mirada de reproche.
- No tendrás miedo ¿O si? - Descubrió mi talón de Aquiles, más que indignación y descontento por aquella elección para empezar nuestro regalo de cumpleaños para mamá me sentía atemorizada pues este año era nuestra primera presentación oficial, con público y toda la cosa. - Zoé, tu eres muy valiente
- Tú también lo eres, Leo.
- Ya lo sé, lo sacamos de nuestros padres y estoy seguro que podrás con esto y más, por las canciones no te preocupes, tocaremos las que acabas de mencionar y otras más que ya sabes así que ahora ve a ponerte ese increíble atuendo que te escogió Alex, deja que ella te maquille y peine sin repelar y prepárate para hacer la primera presentación oficial de Vitale Legionis.
- Pero...
- Mamá me dio permiso de tocar esa canción si es lo que te preocupada, todo irá bien. - Me envolvió con sus brazos en un fraternal abrazo que me brindó la seguridad que tanto necesitaba en ese momento.
- Tendré que usar esos tacones. - Murmuro contra su hombro.
- Es más afirmación que pregunta.
- Es porque conozco tú respuesta. - Suelta una risa y noto con ella que el también esta nervioso.
- Si, por algo te los compré. - Me suelta y revuelve mi cabello para después apretar mis mejillas. - Apresúrate, tocaremos a las seis. - Observé el reloj en su muñeca y eran las cinco, en una hora nos daríamos a conocer. Esta noche no estamos en casa como suele ser en los cumpleaños, mis padres rentaron un salón que no era completamente formal pero tampoco se podía definir como juvenil sino, mas bien, casual y no era del todo un salón, era más un pub con un gran escenario en el cual ahora estaban mi hermano y sus amigos conectando los instrumentos. Era grande y estaba completamente lleno, seguro papá invito a gente de sus trabajo al igual que mamá pues varios eran rostros desconocidos y otros muchos eran amigos que llevaban años de conocerlos y eran a quienes nosotros llamábamos "tíos". Nuestros padres nos dejaron invitar a los amigos más cercanos que en mi caso solo eran Sam e Iván, los busqué por todo el lugar pero solo encontré a Sam que platicaba con Mamá, ella había sido adoptada como una mas de la familia desempeñando el papel de la hermana que siempre he querido. Con paso torpe me acerco a ellas besando la mejilla de mamá.
- Me robó a Sam unos minutos, madre. - Ambas reímos por la manera tan formal en que la llamé. Tome a Sam del brazo enroscándolo en uno mio para ir a nuestros supuestos camerinos donde, por supuesto, ya estaba todo el kit de Sam para arreglarme según como mi hermano le había dicho, me senté en una silla frente a un enorme espejo con focos en el marco que iluminaban cada centímetro de la piel de mi rostro, Sam tenía ya en su mano un atomizador en una mano y una secadora en la otra.
- Gracias por hacer esto, Sam. - Ella no me responde, solo me rocía agua en la cara. - ¿A qué se debe eso?
- Leí en internet que a los gatos se les hace eso cuando hacen algo mal.
- ¿Y yo que hice mal, Sam? - Me seco con la manga de mi suéter pero ella me moja nuevamente.
- Alex, dime Alex. - Lo dice tan detenidamente que es como si estuviera tratando con alguien que no entiende, pero si, yo no entiendo y no me cabe decirle Alex, para mí siempre será Sam.
- No. - Refunfuño con los brazos cruzados. - Para mi siempre serás Sam, s-i-e-m-p-r-e.
Ella suelta un suspiro seguido de una risa seguido de una palmada en su frente y regreso al suspiro.
- Tú, definitivamente, no tienes arreglo.
- Eso es lo que me hace más interesante. - Ambas soltamos una risa y ella empezó a arreglarme, primero empezó por mi maquillaje que fue principalmente en mi ojos pues remarco con delineador completamente negro mis ojos, una línea delgada en la parte inferior pero el parpado dejo de ser color piel y fue color negro, negro como la noche y mis pestañas se habían vuelto abanicos, mis labios de color natural y mis mejillas con muy, muy poco rubor.
- El punto focal de esta noche serán tus ojos y tu cabello pero más tus ojos. - Dijo cuando se paso a mi cabello que termino empapado pues necesitaba aprovechar mis ondas naturales para lograr que mi cabello tuviera un estilo Brian May en sus mejores días y lo logró. Me mire al espejo y estaba maravillada porque la que estaba en aquel espejo no era yo, era alguien diez veces más guapa y que reflejaba una seguridad que yo no tenía.
- Wow. - Murmure después de cinco minutos de apreciación.
- Genial ¿No? - Asentí y sonreí al mismo tiempo. - Cámbiate que solo tienes quince minutos. - Voltee a verla sorprendida y ella asintió entendiendo la pregunta no mencionada. - Y diez minutos más y tu cabello sería más Slash sin sombrero. - Me cambio ahí mismo con ayuda de Sam que hace que mi cambio se ajuste mejor a mi, ella tiene ese toque que hace que cualquier prenda se vea mejor de lo que ya es. Mi ropa consistía de un estilo de los 70’s y los 80’s con un toque moderno: Unos pantalones de cuero negro ajustados que se ajustaban hasta un poco mas arriba de la cintura con unos botines igualmente de cuero que me hacían crecer 15 centímetros pues eran la altura que tenían de tacón, tenían unas correas que iban de lado a lado y unas púas. Una playera blanca que me era de Leo, Sam la fajo con los pantalones y puso unos suspensores color negro conectando la parte trasera y delantera del pantalón a través de mis hombros, me puse un guante negro que tenia los dedos cortados al estilo Madonna que era mas o menos la forma en la que me había vestido solo que también se combinaba varios estilos.
Nuevamente me mire al espejo y los pequeños detalles eran lo que hacían este atuendo increíble.
Quedaban cinco minutos e instintivamente algo alarmo mi cuerpo, hizo que me empezara a sentir mareada y que el sudor amenazara con arruinar el maquillaje.
- Respira hondo, tranquila. - Dice Sam acariciando mis brazos para darme el apoyo que tanto necesito en ese momento. - Te ves increíble, eres excelente tocando la guitarra y cantando ahora solo demuestra eso allá. - Señala hacia la puerta justo donde estaba el escenario. Asentí y respire hondo, sonreí y estaba lista. Unos nudillos golpearon la puerta pero no esperaron respuesta de nosotras ya que entraron al segundo toque, Leo junto con los otros dos: David (batería) y Miguel, o como el prefería: Mike (bajo) me observaron por unos segundos con los ojos abiertos y aproveche para observarlos también. Leo se vistió como Sammy Hagar cuando estuvo en Van Halen, llevaba una peluca rubia que parecía real. David estaba vestido como Tommy Lee Bass de Mötley Crüe en los años 80’s y Mike se veía como Tony Iommi en Black Sabbath con su grueso y marcado bigote, se veían espectaculares, fue como si hubiéramos regresado un poco el tiempo aunque obviamente no éramos sus retratos.
- Te ves espectacular. - Dijo al fin David, él era dos años mayor que yo y siempre he sentido una clase de atracción hacia él pero tiene novia y debía limitar mi relación a un simple somos-compañeros-de-banda-y-tiene-novia-y-es-un-pervertido, era realmente apuesto, sabía de música y tenía un excelente sentido del humor pero lo utilizaba la mayor parte del tiempo hablando de sexo y cosas como esas.
Sonrío pero no hay más tiempo de halagos ni de mi parte ni de la suya: la hora ha llegado.
Tomamos nuestros instrumentos, David sus baquetas, decimos unas palabras de animo y subimos al escenario. El telón caía enfrente de nosotros y Sam esperaba la señal para subirlo la cual Leo dio después de que asentí en su dirección. Las luces de nuestro lado bajaron al punto de hacerse nulas, encuentro el puente de mi guitarra, acomodo mis dedos en las primeras notas de “My heroine” suspiro fuertemente e inhalo de la misma manera, escucho el telón abrirse y detrás de mi las baquetas de David una contra otra dándonos las señal de que empecemos y lo hago, yo soy la que tiene la guitarra principal y así es como empieza nuestro primero concierto como regalo a mi madre. Después de terminar esa canción seguimos con las favoritas de nuestros padres y estamos tocando por aproximadamente cuarenta y cinco minutos. Nos despedimos del publico pero ellos aclaman mas canciones gritando sus peticiones al aire, los escuchamos y nos lanzamos una mirada cómplice Leo y yo, él se acerca a su micrófono y dice que regresaremos en media hora tocando las canciones que hemos recordado, por suerte, la mayoría la hemos practicado mínimo una vez pues son los grandes clásicos del rock…
FIN DEL FLASHBACK

- … Después de eso varios amigos de nuestros padres pidieron nuestro número y tuvimos varias presentaciones, la más grande fue en un bar llamado “Black and White” donde fueron como mínimo doscientas cincuenta personas. - Termine de contarle y sus ojos brillaban mientras me veía sorprendido.
- Increíble… yo… no me lo imaginaba. - Me hundí de hombros pero estaba realmente feliz en ese momento pues recordé una de las mejores épocas que he tenido, a parte, me lleno de nostalgia y no pude evitar llorar un poco pero de solo recordar lo feliz que estaba Leonardo en ese entonces. El tour bus se detiene de repente, Doug y yo nos lanzamos una mirada sorprendidos, vimos a través de las ventanas y ya habíamos llegado al hotel ¿Cuánto tiempo habíamos hablado? O, mas bien ¿Cuánto tiempo había hablado yo?
- Ya llegamos. - Dice una voz que se va acercando por las escaleras y es Tom, Doug y yo nos soltamos de las manos rápidamente pero no evita que Tom nos vea con una sonrisa genuina y alegre. Doug se une con los demás después de despedirse con un simple “Nos vemos”, yo guardo mis cosas y no me sorprende ver que no avance nada. Con todas mis cosas guardadas, bajo las escaleras y el tour bus ya esta vacío, todos estaban fuera hablando unos con otros.
Me uno a el resto y Tommy nos dio una tarjeta a cada uno que era la llave de nuestras habitación y nos fuimos cada quien por su lado después de despedirnos me invitaron a cenar algo con ellos pero yo me excuse diciendo que me sentía cansada y sin hambre pero sus miradas se volvieron inquisitivas cuando mi estomago rugió sorpresivamente y los mire apenada para después decirles que pediría algo por Room Service. Llegue a mi habitación arrastrando la maleta por los pasillos y ni siquiera me di el lujo de ponerme mi pijama solamente pedí un club sándwich, el cual llego a los veinte minutos, y fui directamente a la mesa que estaba enfrente de la ventana colocando mi Mac en ella mientras la despertaba de su suspensión.
Abrí una a una las grabaciones solamente para ver que ángulos tenían para después cortar una parte de cada una y juntarlos en el editor dándoles cierto formato haciendo que la idea que había tenido en el autobús tomara forma pero hubo un momento en el que prácticamente me bloquee y no supe que mas hacer así que me levante con dificultad de la silla pues mis músculos estaban completamente agarrotados, no se cuanto tiempo llevaba en la misma posición, me estire un poco para después ajustar bien el marco de mis lentes pues se habían resbalado por el puente de mi nariz. Me acerque a la ventana y observe lo que mi panorámica me permitía, Sheffield no era tan diferente a Londres pero tenia cierto encanto. Mi vista se perdió a través del cristal hasta que unos nudillos contra mi puerta me sobresaltaron, me quede un poco extraña pero no dude en abrir y al hacerlo me tope con él, tan perfecto como siempre, con su espalda recargada en la pared y lo único que puedo observar es su perfil con la mirada perdida en algún punto del pasillo pero eso no dura mucho pues se gira y me regala una sonrisa, sonrisa la cual me deja desorientada, como siempre.
- Hola. - Murmuro en un intento de no sonar nerviosa.
- Hey. - Dice tan casualmente, tan él.
- ¿Qué... Qué haces aquí? - Cambia su posición cruzando los brazos sobre su pecho dejando caer su peso sobre su brazo izquierdo y recargándose contra el marco de la puerta.
- Iba a fumar un cigarrillo pero vi tu luz encendida debajo de la puerta ¿No podías dormir? - Pregunto con un leve tinte de preocupación pintando su voz.
- Yo... uhmm... Yo... - Y es donde yo empiezo a tartamudear estúpidamente haciendo que una sonrisa burlona pinte sus labios, toco mi flequillo con una de mis manos y lo llevo hacia atrás pero este regresa a su lugar después de pocos segundos, respiro profundamente y busco las palabras detrás de mi garganta mientras cierro mis ojos buscando aquella concentración que él me quita. - Editaba el video que tengo que subir hoy a SuperCity. - Abro mis ojos y el enarca una ceja. - ¿Qué tiene eso de extraño? - Mantengo mi mano en mi cabeza y noto el temblor que esta plantado ahí.
- Nada, solo la hora.
- ¿Qué hora es?
- Casi las cuatro.
- ¿Enserio? - Casi cinco horas ahí sentada, con razón me sentía tan agarrotada.
- Si. - Me sonríe pero de una forma diferente, una forma que no puedo reconocer pero esa forma hace explotar un ejército de mariposas en mi interior.
- Puedes fumar aquí. - Digo lo más casual que puedo mientras indico una señal justo al lado del marco de la puerta.
- Gracias. - Me hago a un lado y él pasa haciendo que por primera vez me fijara en algo mas que no fuera su perfecto rostro sino que en su perfecto cuerpo ahora cubierto por unos simples pantalones de rayas blancas y azules y una playera completamente blanca que se le ajustaba al cuerpo de una manera que lo hacia ver mas... mas ardiente.

Devóralo con la mirada, Zoé.

Dice mi razón y cuando lo hace me doy cuenta que estoy recorriendo cada parte de su cuerpo con una mirada que debería ser ilegal y entonces él voltea atrapándome infraganti, sonríe de lado mientras regresa su vista al frente y la mía se clava al suelo mientras mis mejillas se incendian completamente.
- ¿Dónde? - Dice quedamente.
- Aquí. - Paso a su lado evitando siquiera rozarlo e intento abrir la ventana pero mis manos están demasiado torpes y no logro hacerlo, él nota mis movimientos frustrados, con dulzura retira mis manos pero las sostiene durante tres segundos que siento interminables.
- Yo lo hago. - Me acuerdo de respirar y asiento una vez fijando mi vista en sus manos las cuales abren rápida pero no ágilmente la ventana y la deja completamente abierta, unas leves ráfagas de viento inundan la habitación y revuelven los mechones rebeldes que se soltaron de mi coleta.
- ¿Quieres uno? - Dirijo mi mirada a la cajetilla en su mano, asiento y tono uno, el prende su cigarro con un encendedor el cual solo bajabas la tapa y la flama salía, no recuerdo su nombre pero mi padre tenia varios de ellos casi todos de un color plateado y había uno con el logo de nuestra familia que mando a hacer especialmente para el y otro con una bandera del Reino Unido el cual me regalo a mi pero se perdió en aquel incendio.
Espero que vuelva a prender su encendedor pero no lo hace, acerca su cigarrillo a mí y entiendo sus intenciones. Sonrió de lado, coloco mi cigarrillo entre mis labios y acerco la punta a la del suyo, aspiro un par de veces hasta que este enciende después suelto una bocana de humo y le agradezco en un susurro pero no me quedo a su lado a consumir mi cigarrillo sino que me vuelvo a sentar pues encontré nuevamente el camino de mi idea para terminar aquel video.
- Por cierto... - Comienzo a decir con mi cigarrillo entre mis labios, mis manos sobre el teclado y mi mirada sobre el monitor. - ¿Tu que haces despierto tan tarde?
- No podía dormir.
- Eso es obvio pero ¿Cuál es la razón de tu insomnio?

Dougie's POV
Quiero decirle que ella es la causa de mi insomnio desde el primer día que la conocí, que tanto en el día como en la noche no puedo dejar de pensar en ella pero algo me detiene pues aún siento irreal el hecho de que le dije que me gusta. Estoy casi seguro de que es el temor de decirle de más, ella ya lo sabe pero quiero decirle mas pero no puedo y entonces me siento frustrado.
- Son varias las causas. - Y una eres tu. - Un cigarrillo me distrae casi siempre. - Me hundo de hombros aunque sé que ella no me ve pero yo no puedo dejar de observar cada uno de sus movimientos.
- Yo tampoco he podido dormir bien desde el lu... - Se inmuta rápidamente y se colora un poco mas. - Desde hace mucho. - Dice y cambia nuevamente su posición, ahora gira un poco el torso viéndome de frente, deja su codo izquierdo sobre la mesa y con el final de la palma de su mano detiene su sien haciendo que la piel se le estire un poco y que sus lentes se desacomoden unos milímetros, lo que queda de su cigarrillo esta entre su dedo índice y medio soltando hilos de humo. Después de unos segundos toma una bocanada de su cigarrillo y vuelve a su misma posición, está pensando acerca de algo pero no tiene esa mirada de estar pensando en algo personal sino que trata de buscar algo en su mente que la ayude en su trabajo, aquel trabajo al cual se entrega tanto, el cual ama tanto.
Es increíble ver la pasión que ella tiene a su empleo, siempre que habla de el hay un brillo en sus ojos diferente a cualquier otro. Ella es tan buena en lo que hace por que lo disfruta y da lo mejor para que sea la mejor, así es ella: no se rinde, es fuerte, siempre busca el mejor camino pues esa es la mejor forma de hacer las cosas; bien.
Se queda así por tres minutos y regresa la atención a su Mac, esta demasiado absorta así que justo después de que termino mi cigarrillo me despido de ella, se disculpa por no prestarme mucha atención pero me ha dado lo que mas necesito: su compañía.
Le beso la mejilla y me voy a mi habitación, cuando cierro la puerta a mis espaldas me recargo en la misma sintiendo su fría textura a través de mi playera, cuanto quiero a esa chica.
(* * *)
Zoé's POV
Al día siguiente despierto contra mi voluntad por el sonido del teléfono, la noche anterior había pedido servicio de despertador y vaya que son eficientes.
Son las siete y media de la mañana, solo tres horas de sueño aproximadamente. Con una pereza increíble busco mi celular en la mesa de noche y lo encuentro con un mensaje en la pantalla, mensaje proveniente del número de Dean pero en nombre de él y de David, lo abro y leo palabras tras palabra con una sonrisa tan grande.

Sorry for the word but... It was so fucking amazing! I mean, the clip is completely awesome and it's much better than we thought it could be, way better. We can't wait for the next one! It was a success choose you over any other, YOU ARE THE BOSS!!!!

Y una dulce sonrisa emoji al final lo cual hizo que me emocionara y sonriera hasta que mis mejillas ardieran. Me levanto de un salto pero mi cuerpo no esta tan excitado como mi cabeza y siento los efectos de haber dormido tan poco. Abro las cortinas y la luz hace que entrecierre mis ojos pero no hay sol por ningún lado aunque no me importo mucho pues este clima se había vuelto mi favorito y mi cuerpo ya se había acostumbrado al punto que podía usar unos shorts y los escalofríos no me atacaban tan fuerte como en mis primeros días aquí.
Tenia media hora para arreglarme pues nos íbamos a las ocho, llegaríamos a Manchester como a las nueve y media o diez de la mañana. Los técnicos del escenario y pirotecnia tendrían tiempo de sobra para colocar todo y tener un ensayo a puerta cerrada con los chicos y todo estaría perfecto para las siete y media, hora en la que se citaba a los fans pero el concierto empezaba a las ocho y así seria durante todo el tour.
Tomo mi neceser y me encierro en el baño unos diez o quince minutos y salgo ya que el vapor es demasiado denso. Escojo un conjunto cómodo que consta de unos pantalones negros con cierres en las bolsas, una blusa gris de manga corta con el símbolo de Batman que dejaba un hombro a la vista, debajo de esta me puse una amarilla sin mangas que dejaba ver su tirante amarillo por mi hombro descubierto, el calzado constaba de unas botas de estilo combate militar negras que llegaban un poco mas arriba de mis tobillos y una chaqueta de cuero ajustada que tenia el cierre de lado superior izquierdo con diagonal hacia el inferior derecho, la funda que tenia mi iPhone era negra con el mismo símbolo que la playera y combinaban a la perfección, esa funda me la regalo Tom en Navidad y nunca se la he quitado hasta que Claire me mando una de color rosa con verde y el verde tenia el efecto de estarse derritiendo sobre el rosa, ambas eran geniales y las intercambiaba pues me fascinaban.
Aplique un poco de delineador sobre mis ojos pero esta vez fue tanto en la parte de arriba como en la de abajo solo que el de abajo lo difumine un poco haciendo que mis marrones ojos sin chiste resaltaran un poco mas y para hacer este efecto mas notable aplique mascara sobre mis pestañas que se hicieron mucho mas voluminosas. Mi cabello quedo con su estilo de hondas naturales y como accesorio escojo uno de los cuatro bolso que había traído: uno negro con pequeñas púas plateadas distribuidas por la correa y por casi todo el bolso, lo amo, es mi bolso predilecto pues, a parte de ser genial, es practico y grande ahí cabe mi Mac sin problema.
Una vez lista cepille mis dientes y revise que nada se me olvidara y si no lo hubiera hecho seguramente hubiera dejado mis lentes que estaban sobre la misma mesa de noche donde estaba mi celular hace unos minutos, los guarde en su estuche y este mismo en mi amado bolso, tome mi bolso, mi maleta y mi mochila y salí de ahí hacia la recepción para entregar la llave de la habitación. Una vez ahí firme un papel de constancia o algo así y salí hacia el autobús no sin soltar un bostezo que me hizo cerrar los ojos, cuando los abrí me tope con él en el marco de la entrada del hotel, tal como fue ayer en mi habitación solo que ahora me veía fijamente. Lo salude con un movimiento de la mano y el respondió con un asentimiento y una sonrisa pues tenia ambas manos ocupadas con dos cafés que tenían el clásico logo de Starbucks estampado en ellas. Mis cuerpo decide soltar otro bostezo a cuatro pasos de él y me sonrojo por la cara de hipopótamo bostezando que de seguro le he mostrado pero él solo sonríe.
- Buenos días. - Digo mientras me despabilo de este letargo tan molesto.
- Hey, tus ojos se ven bien. - Lo notó, sonrió al instante a manera de agradecimiento, el estira uno de los cafés hacia mi y lo tomo sintiendo el calor invadir las palmas de mis manos lo huelo y disfruto el olor a... - Capuchino con dos de azúcar y un toque de chocolate, como te gusta. - Doy un sorbo y me encojo al sentir aquella placentera quemazón recorrer mi garganta, no es de mi cafetería favorita pero no puedo negar que sabe exquisito.
- Gracias. - Sonrió nuevamente y veo a los demás a la distancia, los saludo de la misma manera en la que salude a Dougie y caminamos hacia ellos. Hago una especie de malabares al principio por tantas cosas que traía arrastrando conmigo pero Dougie libera un poco la carga al llevar mi maleta con una mano mientras que con la otra toma su café, caminamos en silencio pero no es incomodo.
Dejamos mi maleta con Russ Green, el conductor de este enorme autobús, platicamos con el un par de minutos antes de ser llamados por Tommy Smith diciéndonos que estamos todos y que es hora de marcharnos. Dougie se adelanta por unos pasos y yo lo sigo de cerca pero antes de que Russ cerrara la puerta de donde estaba todo el equipaje distingo el estuche de mi guitarra ahí.
- Oh… uhmm ¿Russ? - Digo rápidamente antes de que la puerta diera su clásico azote señalando que se había cerrado.
- ¿Si, linda?
- Si no es mucha molestia ¿Podría darme esa guitarra, por favor? - La señalo con el dedo y el asiente con una sonrisa. -  Gracias.
- No hay de que. - Le regreso la sonrisa y subo al tour bus, la dejo recargada en un sofá mientras dejo mis cosas en otro y tomo asiento sacando mi fiel y adorado bloc de hojas amarillas con rayas café junto con mi pluma favorita de color plateado. Comienzo a hacer simples garabateos de dibujos que se van transformando en palabras, después en notas, después en letras y al final en una idea para la letra de la canción que compuse hace una semana. Estoy tan absorta en mi mundo que no me doy cuenta de lo que pasa a mi alrededor hasta que la voz de Tom interrumpe mis pensamientos.
- ¿De quien es esta guitarra? - Pregunto él, Danny y Harry jugaban videojuegos, solo giraron cinco segundos para después hundirse de hombros.
- Es mía, Tom. - Volteo a verme y me regalo una aparición de su hoyuelo.
- ¿Puedo tocarla?
- Adelante, seria un honor.
- Pero acompáñame. - Estiro otra guitarra hacia mí, esta era completamente negra, creo que era de Danny.
- ¿Cuál?
- Seguramente la reconocerás. - Danny y Harry detuvieron su juego al mismo tiempo que yo y Tom tomábamos asiento, estábamos frente a frente separados por el pasillo, Dougie se sentó en el mismo sillón que yo. Tom acomodo sus dedos en el puente de la guitarra y Danny nos dio un par de plumillas, yo solo esperaría los primeros acordes de Tom para empezar a tocar y cuando lo hizo reconocí de inmediato aquella melodía: All The Way de Busted. Seguí los acordes uniendo ambas guitarras en una misma melodía entonces Tom empezó a cantar:

It happens every time,
You’ve given me the sign,
We start to get it on,
But then you stop me...

Tom levantó la barbilla en mi dirección indicándome que cantará lo siguiente.

You know I’ve had it up to here,
You need to be more clear,
'Cause you're the one that let me here,
So take me...

Y el coro lo cantamos los dos entre algunas risas y mejillas encendidas de mi parte provocadas por la mirada constante de Doug sobre mí.

'Cause you said that you would,
But then you changed your mind,
How could you do this to me,
It's just so unkind.
And it's cruel if you say that you'll go all the way,
I can't wait for the day,
That you don't change your mind.

Alteramos los turnos y esta vez cante yo antes.

You've got to understand,
Things are getting out of hand,
You can't just leave me sitting here unseen to.

Tom soltó un par de risas ahogadas entre palabra y palabra pues Danny empezó a picar irregularmente sus costillas.

You know I don't know what to do,
Or how long to wait for you,
You said you needed time so I won't rush you.

Y de nuevo, nuestras voces se unieron cantando el coro repitiendo la última línea.

'Cause you said that you would,
But then you changed your mind,
How could you do this to me,
It's just so unkind.
And it's cruel if you say that you'll go all the way,
I can't wait for the day,
That you don't change your mind.
That you don't change your mind.

Dougie se nos adelanto y el siguiente verso lo canto mirándome directamente a los ojos:

I'll never let you down,
I'll always be around,
When you need someone
To catch you when you fall down.
I'm waiting here for you,
If you decide you want to.

Con las mejillas más rojas que un tomate le respondí con dos simples versos para después acelerar nuevamente el ritmo de la guitarra.

If you want me to stay
Then I’m only a phone call away.

Y como gran final: Todos cantamos la última parte formando una especie de coro improvisado con unas voces increíbles, exceptuando la mía.

'Cause you said that you would,
But then you changed your mind,
How could you do this to me,
It's just so unkind.
And it's cruel if you say that you'll go all the way,
I can't wait for the day,
That you don't change...
And it's cruel if you say that you'll go all the way,
I can't wait for the day,
That you don't change your mind,
You don't change your mind.

Una simple secuencia de guitarra que iba de grave a agudo que se desvaneció como un susurro fue nuestro gran final seguido por una gran ronda de aplausos que rompió la forma que Dougie y yo sosteníamos nuestras miradas con tantas cosas en ellas.
-  Que guitarra tan hermosa, Zoé. - Dijo Tom admirando nuevamente mi guitarra que tenia un degradado de colores desde el centro de un color cercano a la mostaza a un negro profundo que recorría casi toda la guitarra exceptuando ese centro que le daba un toque distinto que me agradaba.
- Gracias, la tuve que comprar en vista de que alguien... - Enfatice ese "alguien" lanzándole una mirada acusadora a Dougie que sonrió como si no supiera de que estaba hablando. -  ... Me hubiera regresado la que ese alguien me regalo. - Regrese mi vista al frente pero Doug no tardo en replicar mis acusaciones.
- Bueno, otro alguien no le cumplió a ese alguien la condición para que la guitarra regresara a sus manos. - Sonríe, sonrió. Los demás mas o menos entienden el juego pero Dougie y yo somos los únicos que sabemos de lo que hablamos, me esta reclamando el no cumplir con nuestro acuerdo.
- Que ese alguien fije la fecha y hora. - Digo yo con una sonrisa traviesa. Tom centro toda su atención en mi guitarra mientras tocaba algunos acordes y Danny junto con Harry siguieron jugando videojuegos al no entender el hilo de esto. Doug me regresa la sonrisa y no duda en decir:
- Treinta de julio a las siete en punto, ese alguien pasara por el otro alguien. - Dos días después de que el tour acaba, excelente.
- Perfecto. - Le sonrío y regreso mi atención a mi bloc de notas escribiendo el final del último verso:
I’ve fell in love more than once, more than twice…


9 comentarios:

  1. Sabes que me encanta como escribes, este capitulo me encanto, en serio asdfghj siento que nunca habrá algo que no me guste sfhsjdfhsdkj POR FAVOR, SUBE OTROOOOOO D:

    ¡te quiero!

    ResponderEliminar
  2. hola soy una nueva lectora, gracias a yanan :)
    Me encanta joder! Sube pronto <3

    ResponderEliminar
  3. Gracias por subir :) me encantan como escribes. Dougie me enamora mas de lo que ya estoy de el. Sube pronto ;]

    ResponderEliminar
  4. LO
    AMEEEEEEE
    Y MAS LA ULTIMA PARTE!
    Sube pronto ;)
    Xxx,
    Lola.

    ResponderEliminar
  5. Sube de nuevo. Me encanta :)

    ResponderEliminar
  6. Hola;) me encanta tu fic!sigue subiendo por favor y lo mas rapido q puedas jaja. Mi twitter es @alba_315 para me avises cuando puedas:)Besos desde España

    Alba_

    ResponderEliminar
  7. HOLA :) He leído el fic estos tres últimos días, y me ha ENCANTADO ! Espero que lo continúes pronto, aquí tienes una nueva lectora que amará que sigas subiendo. :) xxx

    ResponderEliminar
  8. Más capítulos pleaseeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee !!!

    ResponderEliminar