lunes, 22 de octubre de 2012

32. He is the perfect distraction.


Observe mi celular intentando reconocer aquel número pero, al no hacerlo, decidí contestar.
- ¿Diga? - No escuche respuesta, más bien, no se escuchaba nada del otro lado, ni una mísera y tétrica respiración típica de una película de terror. - ¿Quién es? - Aún sin respuesta por lo cual decido colgar soltando un bufido exasperado. Seguramente una broma o algo por el estilo.
Mi mente seguía vagando y no lograba concentrar mi atención en nada fijo, en realidad, ni siquiera captaba lo que los chicos decían durante el desayuno.
Alguno pago la cuenta y salimos de ese pequeño pero confortable restaurante, nuestras maletas ya estaban chequeadas para ser subidas al avión así que lo único que yo cargue fue la mochila donde estaban las cámaras y mi laptop y mi bolso en el cual estaba aquella molesta revista que ahora parecía pesar más.
Había una extensa fila esperando pasar a través de los escáneres para ir a la sala de espera correspondiente a nuestro vuelo el cual era el 723 con destino a Lisboa.
Llego nuestro turno y dejamos casi todo, excepto la ropa, en aquellas canastas de plástico, pasamos normalmente a excepción de Doug que olvido quitarse el arete del oído provocando que soltáramos unas risas y una palmada de Tom contra su propia frente.
Una vez pasados los escáneres, atisbe varias tiendas que se enfrentaban una con otra en un pasillo que tuvimos que cruzar para llegar a nuestra correspondiente puerta de abordaje. Echaba vistazos rápidos y sólo de reojo reconociendo una pequeña librería, una perfumería y otras más a las que no les preste especial atención.
Tommy Jay señalo nuestra puerta de abordaje cuando pasamos por aquel pasillo, vimos las clásicas sillas del mismo color que se formaban en filas para que los pasajeros esperarán "cómodamente" aunque, después de estar mucho tiempo sentado ahí, empezabas a sentirte agarrotado e incómodo pero le resté importancia a eso. Deje mi mochila y bolso en uno de los asientos dejando caer mi cuerpo en otro pues ya buscaba sentarse. Eche una mirada al reloj de mi celular, faltaba aproximadamente una hora y cuarto para que nuestro vuelo saliera. Los chicos estaban cerca de mi y estaban sumidos en su plática la cual yo solo escuchaba sin prestar atención hasta que un sonido de mi celular capto toda mi atención, aquel sonido avisaba que un nuevo correo había llegado, pude sentir como mi cuerpo se tenso con solamente escuchar aquello. Dude unos segundos en tomarlo, o bien podía ser Charles con algo importante o, también, podría ser alguien más de la empresa con otro correo como los que estuve recibiendo. Mordí la cutícula de mi dedo pulgar derecho hasta que decidí ver que era. Abrí mi bolso y rebusque en el hasta que lo encontré, observe la pantalla antes de desbloquearlo pero no era nada explícito, sólo anunciaba un nuevo correo. Una vez que lo desbloquee fui directamente a correo utilizando como atajo el centro de notificación y ¡Bum! otro correo juzgándome y deseando mi despido. Leí las primeras tres líneas pero me harte y lance el celular al bolso, apreté mis puños y me hice un ovillo en el asiendo subiendo mis pies al mismo envolviéndolas con mis brazos, deje mi cabeza recargada en el respaldo y perdí mi mirada a través de los enormes ventanales que me dejaban ver a los aviones moviéndose, unos aterrizando, otros despegando y otros acomodándose en sus puertas de abordaje para quedar justo donde aquel túnel conectaba al aeropuerto con el avión. El cielo lucía un tono azul acompañado de un brillante sol y unas cuantas nubes pero no las suficientes para bloquear la luz, era un día hermoso en general pero esto sólo me hacia tener más ganas de regresar a casa, no a mi departamento en Londres, si no, a mi casa en México con la vaga esperanza de encontrar ahí a mi familia. A mi padre con su cálida sonrisa, a mi madre con sus brazos abiertos, a mi hermano aguardando para ensayar con la banda o a mi pequeña hermana con su dulce risa de recién nacida. Me dolía más saber que en cuestión de días volvería a pisar el país que fue testigo del amor de mis padres, que me vio crecer a mi y años hermanos, que fue el último que los vio con vida.
Me siento desamparada, sin un lugar al cual ir o pertenecer, mi departamento ya no se sentía como mi hogar y mi hogar había sido tragado por las lenguas de las llamas en segundos.
Agite mi cabeza tratando de guardar esos pensamientos en una especie de caja fuerte.
Lance un nuevo vistazo al pasillo que ahora lucía más atractivo de recorrer pero al intentar levantarme mi cuerpo se negó, se encontraba rezagado. No podía estirar las piernas ni deshacer el abrazo alrededor de ellas, estaba enfurruñado por todo lo que le he hecho pasar. Después de unos minutos de intentar me di por vencida y me quede ahí perdiendo nuevamente la mirada en aquellos aviones que iban y venían.

Dougie's POV

Ella se encontraba a dos asientos de Danny y yo estaba en frente de él, así que pude observarla mientras hablábamos. Ella no fue participe en esta conversación ni en la del restaurante, en realidad, no la había oído proferir ningún sonido desde que recibió aquella llamada. Regrese mi vista al frente cuando se escucho un sonido proveniente de su celular. Pude ver la duda en su rostro y como mordía su cutícula pensando que hacer, al final decidió ver que producía ese sonido y su faceta lo mostró agobio. Lanzo el celular de vuelta al bolso y se hizo un ovillo en el asiento, soltó varios suspiros y perdió su vista al otro lado de la ventana.
- Vamos, Doug. - Tom capto mi atención al darme una palmada en la espalda.
- ¿A dónde? - Señalo el pasillo que habíamos pasado para llegar aquí. - Pero... - Intente hacerle entender con la mirada que no me quería ir de ahí pero me interrumpió con un gesto de la mano.
- Anda, vamos. - Halo de mi brazo y me puso de pie, lo seguí arrastrando los pies y cabizbaja. No quería alejarme de ella. - Se que no te querías alejar de ella, Doug. - Levante mi cabeza de golpe y el me miro con una sonrisa.
- ¿Lo dije o lo pensé?
- Lo pensaste pero tu rostro lo denota.
- Que bien me conoces.
- Por supuesto. - Hubo un corto silencio. - Sé que ella estará bien, solo esta… agobiada.
- Lo sé.
- Vamos a encontrar la forma de distraerla. - Me dio una palmada en la espalda mientras asentía con decisión. Seguimos nuestro camino por aquel pasillo, Tom se detenía de tanto en tanto a ver algún aparador que le llamará la atención mientras mi mente vagaba en el semblante frustrado y preocupado de la chica que se encontraba hecha un ovillo en aquel asiento.
- ¡Doug! - Llamo repentinamente Fletcher.
- ¿Qué sucede? - Me acerque a donde él estaba, tenía algo entre sus manos que no identifique hasta que estuve más cerca de él.
- La distracción perfecta. - Levanto en el aire un cubo de Rubik. - Vamos a llevárselo. - Asentí y seguimos vagando por aquella pequeña tienda, compramos un par de cosas más como unas cuantas golosinas.
- Tres con sesenta y cinco, por favor. - Tom pago con un billete y sólo esperamos que nos regresarán el cambio. Recorrimos dos tiendas más pero ninguna llamo realmente nuestra atención.
Regresamos con los chicos pero Harry y Danny ya no estaban y Tommy Jay hablaba por teléfono a unos cuantos pasos de donde estaba Zoé, quien estaba en la misma posición solo que ahora su cabeza se encontraba recargada en sus rodillas.
- Dáselo. - Tom me dio el cubo y me guiño un ojo. Me acerque a ella con pasos torpes e inseguros lo que provoco que Fletcher riera pero ahogaba los sonidos. Me senté al lado de ella y deje el cubo sobre un espacio libre de sus rodillas, levanto la cabeza de golpe y fijo su vista en aquel objeto. Después me lanzo una mirada llena de duda pero señale el cubo con la barbilla.
- Anda, hazlo. - La invite y ella sólo movió sus manos tomando el cubo entre ellas, observo con detenimiento cada una de las caras, Tom ya se había encargado de revolverlas todas.
- Nunca he sido buena con esta clase de cosas. - Dijo con un puchero.
- Yo te ayudare. - Le sonreí y ella se ruborizo cambiando su mirada de dirección.

Zoé’s POV

Ciertamente, me sentía desconcertada por aquella sonrisa tan sincera. A pesar de la estupidez que cometí, él sigue a mi lado e intentaba distraerme con una trivialidad como esta que se había convertido en un detalle muy dulce.
- Gracias. - Dije sinceramente. Comencé a buscar la lógica y metodología de este cubo pero, al final, solo me puse a girar las caras pero lo único que lograba era alinear, a lo mucho, tres del mismo color en la misma fila. Note que mi cuerpo ya se podía mover bajo mi voluntad y me senté con las piernas cruzadas en el asiento. - ¡Llevo cuatro! - Dije animosamente cuando logre tener cuatro colores en una sola cara.
- ¡Bien! Te faltan cinco. - Dougie soltó una risa de burla que intento ahogar, le di un puñetazo leve en el brazo y sus risas se volvieron más fuertes las cuales se me contagiaron, él no era consciente de que él era la distracción perfecta. - Esté es el truco. - Tomo el cubo de entre mis manos y cuando lo hizo nuestros dedos se rozaron, una especie de carga eléctrica recorrió mis brazos provocando que retirara rápidamente mis manos. Nuestras miradas se entrelazaron y sentí nuevamente ese rubor invadir mis mejillas. - Eh, tienes que hacer esto. - Rompió el lazo de nuestras miradas bruscamente enfocando su vista en el cubo. - Solo sé armar una cara, no es difícil. - Movió habilidosamente el cubo pero no estaba prestando atención a lo que hacia ni decía solo a él. Nuevamente, estaba siendo demasiado consciente de él pero no de mí por lo que me sorprendí cuando me capturo infraganti observando su perfil, o eso fue lo que yo pensé. - ¿Entendiste?
- ¿Eh?
- ¿Entendiste como armar una cara del cubo? - Levanto el objeto en el aire y me mostro la cara blanca completamente armada.
- Ah, si, por supuesto, gracias. - Tome rápidamente el cubo e hice movimientos a lo torpe.
- En un Meet and Greet, conocimos a una chica que lo armaba en cuestión de segundos.
- Bastante increíble. - Murmure mientras intentaba repasar los movimientos que Doug hacía, pero no eran bastante claros pues solo los había visto de reojo.

Pasajeros del vuelo 723 con destino a Lisboa, favor de presentarse en la puerta A4 con sus respectivos pases de abordar para comenzar con el mismo. Aquellos que estén realizando un vuelo de conexión con destino final hacia Brasil, favor de formar una fila aparte.

Apenas había logrado resolver una cara y media del cubo cuando se escucho la voz de una señorita a través de los altavoces, paso demasiado rápido el tiempo pues hace poco, según yo, Dougie apenas me estaba enseñando como armar una.
- Por fin. - Dije soltando un suspiro exagerado, Poynter soltó una risa. Dejo su codo recargado en su pierna y su cabeza en la palma de la mano un poco ladeada, sonreía de lado. - El tiempo pasó demasiado rápido.
- O tú estabas demasiado sumida en lo que sea que rondaba tu cabeza. - Su semblante se volvió serio. -¿Qué es lo que paso allá atrás? - Estaba segura que mi rostro reflejaba que mi mente no entendía de que hablaba. - El ataque de ansiedad, estoy casi seguro que los paparazzis no fueron el único detonante. - Solté una risa seca.
- Tienes razón.
- Es hora de irnos. - Dijo Tommy Jay justo enfrente de nosotros. Me puse de pie rápidamente antes de que Dougie pudiera preguntar algo más solo esperaba que no nos tocara en los mismos asientos pues todavía no me sentía bien para hablar de aquel malestar que me provocaron los correos y todos los problemas del día de hoy y estaba segura de que Doug no olvidaría fácilmente lo sucedido.

(* * *)

Después de no se cuantas horas de vuelo, habíamos llegado por fin a Brasil. Nuestro vuelo de Lisboa a Brasil salió mas rápido, duro solo media hora por lo cual ni siquiera pude recibir una llamada o mensaje de Charles.
Aproximadamente catorce horas sin saber nada acerca de aquella junta, nada acerca de la decisión que habían tomado ¿Me despedirían? Probablemente si, pero, durante el vuelo, tuve demasiado tiempo para pensar las cosas.
Terminaría mi trabajo en el tour, intentaría seguir las reglas al “pie de la letra” aunque no era muy seguro pero, al final, Charles tendría mi carta de renuncia cuando el tour se terminara ¿A qué se debía esto? A una plática con Poynter después de que el leyera los correos que me habían llegado hace unas horas y su rostro se lleno de furia.
- ¿Qué hora es? - Preguntó Tom en medio de un bostezo.
- No tengo idea. - Respondió Harry adormilado.
- Clara señal de Jet-Lag.- Se veía el sol a través de las ventanillas del avión, todavía no bajamos de este.

Ladies and gentlemen, please check around your seat for any personal belongings you may have brought onboard with you and please use caution when opening the overhead bins, as heavy articles may have shifted around during the flight.
If you require deplaning assistance, please remain in your seat until all other passengers have deplaned. One of our crew members will then be pleased to assist you.
We remind you to please wait until inside the terminal to use any electronic devices or to smoke in the designated areas.

Esperamos unos cuantos minutos, estire mis músculos pues estaban agarrotados, la mayoría del viaje la había pasado dormida y hecha un ovillo en mi asiento.

You may now take your personal belongings and leave de plane. On behalf of International Airlines and the entire crew, I’d like to thank you for joining us on this trip and we are looking forward to seeing you on board again in the near future. Have a nice day!

Tome mi mochila y bolso con ayuda de Dougie pues el estaba en el asiento del pasillo y yo en el de la ventanilla.
- Vamos. - Nos dijo Tommy Jay. Salimos del avión y, a diferencia del interior que estaba con aire acondicionado, hacia demasiado calor.
- Me voy a derretir. - Exprese con un tono de dramatismo mientras ponía las manos en mis mejillas lo que hizo reír a mis acompañantes. Una vez dentro del aeropuerto, nos dirigimos al área donde se recogían las maletas. Mientras las bajaban del avión y las ponían en la banda, quite el “modo avión” de mi celular y vi que había un mensaje nuevo de Charles:
Zoé, please text me when you see this, I have something really important to tell you.
Le respondí el mensaje diciéndole que recién habíamos llegado y no pasaron ni cinco minutos cuando me había marcado.
- Chicos, voy al baño, enseguida regreso. - No espere la respuesta y salí como una bala al baño de damas que estaba a metros de donde nos encontrábamos. - Hola, Charles.
- ¿Cómo estas, Zoé? - Solté un suspiro.
- Estaré bien ¿Qué pasa? Suenas mal.
- Estoy mal, Zoé.
- ¿Por qué?
- En la junta que tuvimos, hubieron varias discusiones pero la conclusiones que están muy molestos. Como leíste, buscaban tu despido pero logre convencerlos de que era innecesario.
- ¿Y?
- Te van a poner a prueba cuando regreses.
- ¿A prueba?
- Si, estarás tres meses a prueba con un salario inferior al que manejas ahora.
- No me importa el salario, Charles ¿A prueba cómo? No me queda claro. - Solo un pesado suspiro.
- No podrás desempeñar tu trabajo normal, serás asistente de otro fotógrafo pero, en realidad, eso es lo que supone que tendrías que haber hecho desde el principio. También están molestos conmigo por contratarte de inmediato y en aquel puesto sin haber seguido las reglas.
- ¿Sabes qué, Charles? Creo que esto es completamente innecesario y hasta cierto punto extremó. - Trague saliva para seguir hablando. - Si no me equivoco, mi trabajo ha cubierto y superado las expectativas que se tenían en un principio. Todo lo he entregado en tiempo y forma, desde siempre. - Hice una pausa esperando a que me respondiera pero sólo asintió con un ruido proveniente de su garganta. - Si esperas que me arrepienta por lo que he hecho, temo decirte que no lo haré.
- Te entiendo, pero…
- Charles, sé que rompí las reglas y viole mi contrato pero tú me conoces, tú estuviste ese día en el que Dean y David me buscaron. No fue gracias a los chicos, fue gracias a mi trabajo - Mi voz estaba temblorosa, había alcanzado mi limite. - Charles, terminare mi trabajo en el tour tal y como quede con Dean y David pero ese será mi ultimo trabajo con esta empresa narcisista. Tendrás mi carta de renuncia en tu escritorio en cuanto el tour acabe.
- No tomes decisiones precipitadas.
- No fue precipitada, Charles. Estuve no se cuanto tiempo meditándolo, es lo mejor tanto para tu empresa como para mi. Espero que no lo malentiendas, te estoy profundamente agradecida por esta enorme oportunidad, no tienes idea y sabes que eres mi modelo a seguir, pero… Pero esa clase de cosas no es algo que este dispuesta a soportar.
- No puedes hacer esto.
- ¿Por qué no? - Estaba exaltada y molesta, mi voz había aumentado de tono y los manotazos en el aire se marcaban con más intensidad. - No sabes cuanto he soportado y me he dado cuenta que esa empresa esta completamente llena de hipócritas ¡hipócritas!
- No lo hagas, Zoé. Yo…
- ¿Qué, Charles? ¿Qué usaras para tratar de convencerme? - Se escucho un estruendo al otro lado de la pared pero no lo suficientemente fuerte o intenso para acallar aquellas palabras que Charles acababa de decir, palabras que formaron un nudo en mi garganta y liberaron aquellas lagrimas acumulados. - No… - Murmure con lo poco de voz que quedaba en mi cuerpo, esa voz estaba rota.









¡Hola! c: Perdón por tardar (otra vez) en subir pero, si todo sale bien, estaré subiendo capitulo el viernes y después otro y después otro y después maratón, o eso es lo que tengo planeado.
Me sorprendió ver tanto likes en el capitulo anterior (23) Definitivamente, más que el anterior que ese pero se tardaron un poco mas en llegar, también eso influyo a que me tardara un poco más.
En fin, dejen mas comentarios y likes por favor, realmente me gusta leer sus opiniones.
Que tengan linda noche y buen inicio de semana.

Zoé :3

viernes, 5 de octubre de 2012

31. You don’t know who I am.


No estaba tan sorprendida después de todo, sabía que alguno de ellos la había tomado cuando descubrí que la foto la había enviado yo, originalmente creí que alguien más de los que iban en el autobús la había tomado y enviado a la revista pero desde que Logan me advirtió que tuviera cuidado con lo que enviaba me alivio saber que la supuesta "conspiración" al final término siendo una paranoia mía.
Esperaban mi respuesta pero la única que obtuvieron fue un encogimiento de hombros.
- Lo sentimos tanto. - Dijo Jones.
- No tienen por qué disculparse, fue mi culpa, la fotografía la envíe yo. - Sus semblantes cambiaron a unos completamente sorprendidos. - Logan me pidió un avance del trabajo, me confíe y le mande diez fotos al azar sin revisar cuales eran y ahí estaba esa. - Señale la revista con la barbilla.
- Y ¿Cómo llego la foto a la revista? - Pregunto Dougie.
- Logan la envío. - Fruncieron su ceño y me hundí nuevamente de hombros.
- Espera... ¿Cómo sabes que él fue?
- Él me llamo y me dijo.
- ¿Para qué hacer algo así? Es ruin. - Asentí al comentario de Tom.
- Según él, para darme una lección sobre las relaciones que tengo. - Le lance una significativa mirada a Dougie.
- Nunca quiso que pasara algo entre tú y yo. - Asentí nuevamente.
- En fin, a las cinco tendrán una junta donde decidirán que hacer conmigo, probablemente me despidan y tenga que abandonar el tour. - Dije como sí no fuera nada de que preocuparse, camine hacia el elevador con mi maleta a rastras, sentí como los demás me seguían.
- ¿Te pueden despedir por eso? - Cuestiono Fletcher.
- Si, fue una violación a mi contrato. Charles logro convencer a la junta directiva de que discutieran mi sanción pues querían mi despido inmediato.
- Es una estupidez. - Dijo Dougie perplejo.
- No tanto, lee lo que dice el artículo. - Hice lo que le pedí y frunció el ceño después de leer.
- ¿Cómo demonios pueden pensar eso? ¿Acaso no conocen tu trabajo?
- Por eso mismo es que lo dicen, conocen mi trabajo dentro de un estudio y cosas por el estilo pero jamás me habían visto en algo así, aparte, no saben que Dean y David tenían proyectos que no les permitían salir de Inglaterra y al final hicieron sus estúpidas conclusiones.
- Serán idiotas. - Murmuro enfurruñado Dougie.
- ¿Qué vas a hacer? - Hablo Fletcher después de unos minutos de no hacerlo.
- Esperar la llamada de Charles. - En ese instante entramos al elevador en un silencio que se sentía tenso y fui consciente del dolor que invadía di cabeza. Llegamos al lobby donde ya estaban Harry y Tommy esperándonos, Tommy nos dijo que iríamos directamente al aeropuerto pues se encontraba a una hora y tantos del hotel, una vez allá tomaríamos un desayuno antes de abordar.
Por obvias razones aquel enorme y cómodo autobús se dejó en Inglaterra por lo cual ahora viajábamos, normalmente, en una camioneta blanca o negra, hoy era una negra. Mientras subían el equipaje los chicos hablaban de algo a lo que no preste atención, nos dieron la indicación de subir a la camioneta y me dejaron subir primero, decidí sentarme al lado de la ventanilla donde podría perder mi vista y mente, si es que mi cuerpo me lo permitía. Uno a uno fue subiendo, a mi lado se sentó Tom. Saque los audífonos y me los puse antes de que la camioneta arrancara, los conecté a mi celular y decidí ponerlo en aleatorio, la primera canción que sonó fue "All your fault" de You Me At Six.
Aproximadamente en la mitad de la cuarta canción que escuchaba empecé a sentirme adormilada pero no quería caer en la inconsciencia. Me removí en mi asiento propinándole un golpe accidental a Tom en el hombro, deje los audífonos en mi cuello antes de decirle algo.
- Lo siento, Tom. - Me regalo una sonrisa y una aparición de su hoyuelo. - ¿Qué escuchas? - Se oían sólo algunas notas provenientes de mis audífonos, sonaba Queen con "A Kind of Magic". Quite los audífonos de mi cuello y se los puse a Tom, identifico la melodía empezando a tararearla. Señalo con su barbilla el celular en mi regazo, yo asentí y él lo tomo dejándome sin mi distracción.
El sentimiento de letargo no se marchaba, insistía en hacerme cabecear. Deje mi frente apoyada sobre el respaldo del asiento que estaba delante mío, mi cabello formo una cortina que cubría mi rostro. Inconscientemente cerré mis ojos pero los abrí de golpe cuando una mano acaricio mi coronilla. Levante mi cabeza pero deje mi barbilla recargada donde había estado mi frente hace unos segundos.
- Hey. - Dije cuando vi aquel par de ojos mirándome con ternura.
- ¿Te sientes bien? - Su mano siguió recorriendo mi cabello conforme hablaba manteniendo un ritmo constante, me hacia sentir más adormilada.
- En realidad no. - Le di una seca sonrisa pero después hice una mueca entrecerrando los ojos por el involuntario palpiteo en mi cabeza.
- ¿Qué pasa? - Sin necesidad de verlo pude notar su preocupación.
- Dolor de cabeza, nada grave. - Su mano se había detenido y ahora sólo estaba ahí, plantada en mi coronilla. Miradas, sentía miradas en mi, en nosotros. Ladee la cabeza levemente y abrí un solo ojo topándome con el resto de McFLY en una posición bastante cómica: completamente agrupados y amontonados en la esquina contraria de la camioneta, todos tenían ambas manos cubriendo sus bocas y cuchicheaban entre sí mientras nos observaban y soltaban cada cierto tiempo un "son adorables" o "awww" seguido de unas risas agudas. Dougie y yo reímos por su reacción, regrese a mi posición anterior y al hacerlo note las enrojecidas mejillas de Doug.
- Zoé. - Tom llamo mi atención después de unos pocos minutos. - Te llego algo. - Estiro mi celular hacia mí mientras me incorporaba y lo tomaba.
- Gracias. - Fijando la vista en la pantalla, lo desbloquee y fui a la aplicación de correos, tenía más de veinte que habían llegado hace una media hora aproximadamente.
Más correos llenos de insultos de aquellos que alguna vez fueron mis supuestos compañeros. No había trabajado ni con la mitad de ellos, de hecho, sólo había trabajado con Scott una sola ocasión pero al resto lo conocía sólo de vista y ahora me juzgaban e insultaban, la sociedad esta jodida.
Leí cada mensaje y los borraba cuando terminaba de hacerlo, el último que leí fue de una señora que creo no haber visto nunca o, al menos, no reconocía su nombre:

He trabajado en esta empresa por más de doce años. Obtener este trabajo fue una de las cosas más difíciles que he hecho pues he empezado desde lo más bajo hasta ir ascendiendo y llegar a este puesto que tú conseguiste tan fácil y rápido, lo que nunca he entendido es el porqué de esto. Llevas meses en esta empresa y ya tienes el titulo que yo siempre he querido tener: “La fotógrafa mas prestigiada de Inglaterra” y tu no te das cuenta de esto. Eres despistada y descuidada y con ese error que cometiste ahora creen que has sido contratada por las relaciones que tienes lo cual es verdad, pero no solo te afecto a ti, esta enorme empresa también se ha visto mal pues ahora hay rumores que dicen que todos somos mediocres e incompetentes, demostraste que solo buscabas fama lo cual te convierte en una persona ventajosa.
La preferencia que tiene Charles hacia ti es bastante notoria ¿Qué hiciste para conseguir este trabajo tan fácilmente? ¿Acostarte con él? ¿Hacerle favores? ¿Chantajearlo con algo? O simplemente ¿Te aprovechaste de tu cara de niña estúpida y de tu situación?
Si, sé de tu situación, sé a la perfección quien eres: Una mexicana que perdió a su familia en un incendio y que llego aquí con su tía la cual, casualmente, también trabajaba en esta empresa y era muy allegada a Charles.
Espero que aprendas algo de esto y, honestamente, espero te despidan pues no mereces este trabajo, no te esforzaste por él y, al parecer, no haces nada para preservarlo.

Lagrimas acumuladas que no podía dejar escapar, un grito de desesperación atorado en la garganta, los puños apretados por la frustración, la lengua mordida para no soltar una horda de palabras altisonantes que mis acompañantes no merecían escuchar.
El enojo y la frustración eran inmensurables en estos momentos por ser juzgada al punto de ser acusada de obtener este trabajo con mi cuerpo y no talento y esfuerzo.
Las personas tenemos varias caras y emociones, pueden ser buenas o malas. Todo ser humano tiene un lado malo que no siempre es demostrado pero ahí esta, lo peor no es cuando muestran ese lado y saben que lo hacen, es cuando no saben lo que están haciendo y se vuelve crueles impulsivos que descargan sus emociones en palabras contra otra persona. Otra cosa que tenemos los seremos humanos es que pensamos que sabemos todos, somos soberbios. Creemos tener mas experiencia que otro y nos sentimos con el derecho de dar consejos o reprimendas a quien según nuestro criterio las merezca.
Podemos juzgar a los demás pero jamás vamos a juzgarnos a nosotros mismos, recuerda que cuando señalas a alguien tienes tres dedos mas apuntando hacia ti.
La verdad lastima pero es necesaria.
Pero esto… Esto no es verdad, creen conocer mi historia, creen conocer quien soy cuando ni siquiera han tratado conmigo, cuando no saben que hay detrás de mi sonrisa o de mis ideas.

¿Cómo una persona con la que ni siquiera he hablado puede decir que sabe perfectamente quien soy? Ni siquiera yo misma puedo definir eso.

- ¿Zoé? - Me percate de que tenía mi vista perdida en mis pies. - Ya llegamos. - Danny era quien me hablaba desde la puerta de la camioneta. Levante mi cabeza rápidamente y observe a través de las ventanillas el entorno, pude ver las clásicas puertas de los aeropuertos con sus respectivos señalamientos. Lance el celular a mi bolso con los audífonos y baje con ayuda de Danny. Tommy Jay se había adelantado un poco pero regreso inmediatamente después de asomar la cabeza por las puertas.
- Esta lleno de fans y paparazzis. - Dijo frotándose la frente con un semblante pensativo, todas las miradas se fijaron en mí, no supe que hacer ni como reaccionar.
- ¿Qué podemos hacer? - Pregunto Dougie al notar mi estado en blanco.
- No podemos estar huyendo cada que los veamos, saben que estamos aquí. - Respondió Judd.
- Pero…
- Tiene razón… - Interrumpí a Doug. - Ustedes tienen que entrar primero, yo iré con el resto del equipo.
- El resto del equipo ya partió a Brasil. - Cierto, vuelo especial con toda la escenografía y cámaras, maldición.
- Haremos lo que siempre hacemos; entraremos, firmaremos algunos autógrafos y mientras eso pasa, Tommy llevara a Zoé a check-in y ahí nos veremos. - Resolvió Tom rápidamente y todos asentimos. Los chicos se adelantaron a excepción de Doug quien tomo mi mano y me llevo a la parte contraria de la camioneta donde las cámaras no podían captarnos.
- Te noto extraña ¿Qué pasa? - Seguía enfadada por las palabras de aquel correo, frías y crueles.
- Mal día, Dougie, eso es lo que me pasa.
- Hay algo más.
- ¡Doug! - Reconocimos la voz de Tom llamándolo
- Ve. - Dije empujándolo levemente.
- Pero…
- Ve. - Lo mire directo a los ojos prometiéndole que le diría después, asintió un par de veces, beso mi mejilla y se marcho pero no sin antes echarme una ultima mirada con un “nos vemos” pintado en ese par de lienzos azules.
Solté un suspiro del que no fui consciente hasta que mis pulmones exigieron aire nuevamente.
Rodee la camioneta y me situé junto a Tommy tomando uno de los dos carros donde estaban las maletas, Tommy avanzo y con paso dudoso lo seguí.
Faltaba menos de un metro para cruzar las puertas del aeropuerto y los flashes de las ansiosas cámaras llegaban hasta mi pero estaban enfocadas en las cuatro figuras masculinas rodeadas de fans.
Tommy entro primero cuando las puertas automáticas se abrieron, teníamos que dar vuelta a la derecha para ir a donde se tenia que hacer check-in por lo cual me escude en el lado izquierdo de Tommy para que no vieran. Estábamos a punto de llegar, era cuestión de metros, pero un paparazzi extraviado me cegó con su flash, grito mi nombre atrayendo a otros paparazzis que me bombardearon con sus cámaras, me sentía desorientada, las luces eran demasiado fuertes y brillantes. Ya no veía a Tommy y los empujones eran más constantes, se fueron acercando más y más hasta que me encerraron en un círculo de luces y preguntas. Sentí mi pulso temblar, intente observar mis manos pero no podía moverme, un mareo se apodero de mi cuerpo, mi garganta se sentía seca y mi vista se empezó a nublar, estaba teniendo un ataque de ansiedad en aquel lugar y no podía librarme de aquella horda de reporteros. Intente pedirles espacio pero no salían palabras de mi garganta. Estaba a punto de desvanecerme justo ahí.
- No va a comentar nada, por favor, permítanos pasar. - Tommy me tomo de la cintura mientras me cubría con su brazo libre y nos abría paso para irnos. - Perdona, Zoé, te perdí la pista. - No respondí, trataba de estabilizar mi agitada respiración. - ¿Zoé? - Oía eco en sus palabras. - Estas muy pálida.
- Ataque de ansiedad. - Dije entrecortadamente, un ataque de ansiedad es una reacción del cuerpo para defenderse de situaciones que no le gustan o, como en este caso, resultan estresantes. Hace años que yo no sufría uno de estos, había aprendido a controlarlo solo que antes las “situaciones estresantes” era notablemente inferiores a la del día de hoy. Tommy me sentó sobre una de las maletas que llevábamos, respire profundamente varias veces e intente templar mi mente.
- ¡Zoé! - Escuche gritar a Fletcher a unos cuantos metros de mí. - ¿Qué te paso? ¿Estás bien? - Asentí un par de veces.
- ¿Alguien tiene agua que me regale? - Pregunté con voz ronca y seca, apagada inclusive. Harry me dio una botella la cual me zampé en cuestión de segundos, gracias a esto mi garganta se recupero y aprovechando que el plástico de la botella estaba frio, la coloque en mi frente y la sensación de alivio fue inmediata. Observe mis manos el temblor que sospeche tenían seguía ahí pero en una medida menor. - No se retrasen por mi, estaré bien. - No voltee a verlos pero pude notar su escepticismo pero le reste importancia. Tommy se hizo cargo de todo el trámite para chequear las maletas y que nos dieran los pases de abordar.
Ya con todo esto listo, nos dirigimos a una cafetería donde pedimos algo para desayunar, las preguntas no se hicieron esperar una vez que teníamos la comida enfrente.
- ¿Qué fue lo que paso allá, Zoé? - Dijo Tom.
- Nada importante.
- No mientas, Zoé. - Tommy Jay uso un tono severo de voz, intente ignorar aquello y seguí ingiriendo mi desayuno pero Tommy no lo dejaría pasar. - Sufrió un ataque de ansiedad.
- Eso es algo importante. - Me reprochó Fletcher. - ¿Sucede a menudo?
- No, hace años que no me pasaba.
- ¿Por qué paso esta vez?
- Por que mi cuerpo se enfrento a mucho estrés, se esta enfrentando. - Conteste sin levantar la mirada del plato. - Tampoco habíamos comido, influye en gran parte. - Dije restándole importancia al asunto y esperando que nadie comentara nada más cuando una llamada de un número desconocido entro a mi celular.









He aquí, mi aparición prometida. Je, pues el capitulo pasado tuvo muchos mas likes en unos cuantos días que el resto de los capítulos en meses y se los agradezco, no tuvo tantas visitas pero saber que mis lectoras se están haciendo presentes por medio de un like es bonito, bonito. También muchas gracias por aquellos comentarios que me alegran, me encanta leerlas y saber lo que piensan de esta muy rara historia.
La sorpresilla mencionada la entrada pasada es referente a ... ¡Maratón! Si, como leyeron, en unos cuantos capítulos haré un maratón de ___ capítulos. Pronto les daré mas detalles.
En fin, espero haya mas comentarios y, si quieren, déjenme su usuario de Twitter para que les avise cuando suba nuevo capítulo c:
Recuerden: Más likes y comentarios = Capitulo nuevo antes, ustedes deciden.
Me despido.


Zoé.